Wednesday, October 08, 2008

EL FÓSIL

-Escribí lo vivido, para poder extraviarlo..-

Me encontré con este objeto, sin querer, escarbando. Lo acerqué y abrí, para ver si realmente se trataba de lo que creía. El hallazgo incendió mi rostro, haciendo ver mi sonrisa como una cicatriz. Un profundo vértigo me envolvió, ¿era yo quién estaba frente a un objeto ahora, o a través del objeto alguien me observaba desde millones de años atrás?. Me embriagó la idea de un espacio sin tiempo y un habitar de todos los tiempos a la vez.

Un escalofrío.

El aire alrededor era glacial y plateado. Giraba. Era escarcha en suspensión llenando y vaciando mis pulmones desdeñosamente. Pase meses enteros de rodillas en aquel lugar, absorto, atrapado por la hipnosis del espiral, de este huracán semejante a un sol recién nacido posado en mis manos, que me devolvía la mirada de un tiempo pasado, los huesos de la memoria.

Al cerrarse el invierno, cave cerca un agujero donde poder dejar este artificio del tiempo, lo haría un sol ciego, una sombra temporal. Para finalizar, luego de haber sellado con tierra la fosa, puse una piedra encima. Entonces algo me asombró. Al cabo de unos segundos comenzaron a aparecer unas marcas en la piedra:


Tu recuerdo fue el presente del pasado.



Me puse de pie, algo abatido, con la sensación de haber sufrido una alucinación, pero el remolino plateado persistía, como un testigo funesto de los hechos. Necesité un par de horas para recuperar mis fuerzas, entonces me desperecé y abandoné el lugar.
Luego cayó la noche.